HARD CANDY
He aquì la pelìcula que pone a prueba la tolerancia de un cinèfilo. Y tambièn es un divertido (yo lo intentè), de poner a prueba a tus amigos o familia frente al televisor.
El cine "para provocar" tiene muchos representantes, y radica su fuerte en probar al espectador cuanto aguanta antes de salir disparado del asiento reclamando la devolcuiòn del dinero. Desde su origen bàsico (el gore), hasta obras màs complejas (Irreversible, Solo Contra Todos, ambas de Gaspar Noè) han sido piezas pèsimamente tratadas por utilizar el "entertainment" como medio de llamar la atenciòn de otra manera.
Hard Candy es por lejos la cinta de provocaciòn del año 2006. Una niña de 14 años conoce a un hombre de 32 a traves del chat y deciden conocerse en persona. Al momento de la reuniòn, todo da para pensar de que èl (un tipo nada de mal parecido) sea un pedòfilo. Ella acepta ir a su casa para escuchar un disco inèdito que le vuela la cabeza, ya estando en su hogar uno comienza a presentir lo peor con ella en pleno territorio enemigo y vulnerable por donde se le mire. Y es donde la cinta invierte la suposiciòn, y es la chica quien toma las riendas al atarlo y luego torturar (sin conseciones al espectador, ni al dolor) a un tipo que se pasa todo el filme pidiendo clemencia por un crimen asegura no cometiò.
Hard Candy no es explìcita, y en eso radica su poder, porquè pone todo su peso en dos actuaciones magistrales, ya que no corre una gota de sangre en toda la pelìcula, salvo una castraciòn en la mitad, y ese es su mèrito.
Sòlo para estomagos fuertes y espectadores con criterio muy formado. Es mejor no arrendarla como panorama de un viernes en la noche. Porque si hay a quienes nos gustan que nos alteren, es preferible que lo hagan en privado, para no herir susceptibilidades.
Muy Buena.
posted by Cinèfilo @ 3:07 AM
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